La planta de motores del Grupo BMW en Steyr, Austria, ha dado un paso significativo hacia la sostenibilidad al completar la transición a fuentes de energía completamente renovables antes de lo previsto. En un esfuerzo por reducir su huella de carbono y mejorar la eficiencia energética, la planta ahora opera con electricidad verde y calefacción urbana a base de astillas de madera, dejando de lado el uso de gas natural.
Originalmente planeada para finales de 2024 o principios de 2025, esta transformación se ha implementado en septiembre de 2024, adelantándose a los plazos establecidos. La calefacción de la planta ahora proviene de una central de biomasa cercana, gestionada por los proveedores de energía Energie AG Oberösterreich y EVN Wärme GmbH, que suministran el calor necesario para las operaciones de la planta. Este sistema utiliza astillas de madera de los bosques locales, lo que garantiza una fuente de energía renovable y sostenible.
El cambio de suministro energético fue celebrado en un acto simbólico ante más de mil empleados, en el que Arnold Schwarzenegger, junto a Milan Nedeljković, miembro del Consejo de Producción de BMW, marcaron el inicio de esta nueva era para la planta.
La planta de BMW en Steyr, que consume aproximadamente 250 gigavatios por hora de energía al año —equivalente al consumo de unos 59.000 hogares— ha logrado reducir su consumo de energía por motor a la mitad desde 2006.