Toyota ha dado un paso importante en su compromiso con el desarrollo económico y la sostenibilidad en América Latina al iniciar las obras de su nueva planta en Sorocaba, estado de São Paulo, Brasil. Esta expansión forma parte de un ambicioso plan de inversión de 2.000 millones de dólares que la compañía ejecutará hasta 2030.
Con esta nueva planta, Toyota busca fortalecer su presencia en el mercado brasileño, aumentar su capacidad de producción y continuar con su liderazgo en el sector de la movilidad electrificada. El nuevo complejo industrial de Toyota en Sorocaba ocupará un área de 160.000 m² dentro de un terreno de 400.000 m², equivalente a 40 campos de fútbol. La planta comenzará a operar en 2026 y será capaz de producir vehículos y motores, con un énfasis particular en modelos híbridos flex, que combinan la electrificación con biocombustibles. Estos modelos son clave en la estrategia de Toyota para liderar la transición hacia una movilidad más sostenible y accesible en Brasil y América Latina.
Además de la producción de vehículos, la planta será responsable de la fabricación de dos nuevos modelos híbridos flex que estarán disponibles en el mercado local a partir de 2025. Estos vehículos están diseñados para ser altamente eficientes, ofreciendo una alternativa más ecológica y económica para los consumidores brasileños, y representarán un impulso significativo para las exportaciones de Toyota a otros países de América Latina.
El proyecto de expansión de la planta de Sorocaba no solo fortalecerá la industria automotriz en Brasil, sino que también tendrá un impacto positivo en la economía local. Se espera que la nueva planta cree 2.000 nuevos empleos directos hasta 2030, y más de 10.000 empleos indirectos en la cadena de suministro y otros sectores relacionados. Solo la ampliación de la planta generará 500 empleos adicionales a partir de 2026, lo que contribuirá a la creación de una fuente de ingresos estable para muchas familias en la región.
Este aumento en la capacidad de producción también beneficiará a los proveedores locales, ya que Toyota planea localizar una mayor parte de sus componentes y sistemas de alta tecnología en Brasil, lo que reforzará la cadena de suministro y la competitividad del país.
El CEO de Toyota para América Latina y el Caribe, Rafael Chang, destacó que la expansión en Sorocaba refleja el compromiso de Toyota con el futuro de la movilidad en Brasil y la región. "Esta expansión nos permitirá ampliar nuestra producción local, aumentar nuestras exportaciones a toda América Latina y generar más valor para la sociedad en términos de empleo y desarrollo económico", comentó Chang.
Toyota continuará enfocándose en la electrificación, con la producción de vehículos híbridos flex que ya están ganando popularidad en Brasil debido a su eficiencia y bajo impacto ambiental. Con este proyecto, la marca no solo refuerza su liderazgo en la región, sino que también establece un modelo de cómo la industria automotriz puede contribuir a la sostenibilidad y el desarrollo económico.