Tráfico Vehicular

Lima y Callao estarían entrando en Crisis de transporte urbano por falta de apoyo del Gobierno

La situación del transporte masivo de Lima y Callao en buses está llegando a su punto más crítico, lo que podría llevar a la quiebra de las empresas y al retiro total de los buses de las vías.

Desde septiembre de 2022, se ha solicitado apoyo al sector formal del transporte urbano para recuperar el equilibrio económico de los contratos de concesión. Sin embargo, la crisis se ha agravado debido a la coexistencia de servicios informales, la disminución de la demanda debido a la pandemia, el aumento del precio de los combustibles y otros factores. A pesar de que el Ministerio de Economía tenía conocimiento de la situación desde septiembre de 2022, no se ha encontrado una solución efectiva ni se ha brindado el apoyo necesario.

El transporte masivo requiere financiamiento y apoyo del Estado, al igual que el subsidio del pasaje del Tren Eléctrico. La falta de solución a esta problemática afecta la confianza del sector financiero en el transporte y dificulta futuras mejoras en el transporte público, como la incorporación de la electromovilidad. La falta de renovación del parque automotor de servicios de transporte formal y la creciente antigüedad de los vehículos están generando problemas de competitividad, contaminación y congestión vehicular en el país.

El gremio automotor se muestra preocupado por la situación del transporte público formal y solicita el restablecimiento del equilibrio económico-financiero para garantizar la continuidad y sostenibilidad del servicio. Es fundamental que el Estado cumpla con sus obligaciones y brinde las condiciones necesarias para reactivar la flota de buses que actualmente está paralizada por falta de liquidez. De no resolverse esta situación, empeorará la calidad del transporte público y perjudicará a los ciudadanos que demandan un servicio eficiente.

Es urgente encontrar una solución inmediata a esta situación, ya que los peruanos llevan años reclamando un transporte público eficiente y las autoridades han hecho caso omiso. La quiebra de las empresas formales empeoraría la situación y afectaría a la población de manera significativa.